En una nota publicada hace unas semanas en la revista Panrotas (Pão de Açúcar é retirado de campanha mundial) se recogía la noticia de que el listo empresario suizo por detrás de la elección de las 7 nuevas maravillas naturales había decidido excluir de la lista de candidatos al Pan de Azúcar de Río de Janeiro.
¿La razón? El apoyo a la campaña a la elección del Pan de Azúcar de algunas empresas privadas. Pero atención, no es que no se permita que empresas privadas, con sus intereses declarados, intervengan en el proceso. El problema radica en que las empresas que apoyaban al Pan de Azúcar no tenían un contrato comercial con la entidad del empresario suizo. Y claro, si no entra dinerito en caja, no hay elección (en eso el empresario europeo no se diferencia de muchas revistas de viajes, algunas de ellas prestigiosísimas, que también exigen peaje para figurar en sus ránkings).
Y todavía hay gente que se emociona con el suizo.
P.S.: quería aprovechar para actualizar la ridícula saga camino de la inmortalidad de ese lugar sin igual que son los Lençóis Maranhenses (ver Lençóis Maranhenses: ¿Maravilla natural? y Los Lençóis Maranhenses serían el candidato brasileño). Los Lençóis Maranhenses no están en la lista de finalistas brasileños. Me gustaría leer alguna explicación del Ibama al respecto.
——————————
ENTRADAS RELACIONADAS:
Cuando el orgullo patriótico entra por la puerta…
7 nuevas maravillas naturales
Nota de la ministra de turismo brasileña
Resultado de la elección de las 7 nuevas maravillas del mundo moderno
La UNESCO y las nuevas maravillas del mundo
A vueltas con las 7 nuevas maravillas del mundo moderno
Las 7 maravillas y la violencia
7 nuevas maravillas del mundo