Vuelve a estar cerrado el aeropuerto de Guarulhos ahora por la mañana, tercer día consecutivo, y los vuelos que llegan están siendo desviados a Río y Campinas. Este fin de semana, el ministro de Defensa brasileño pidió la cabeza de los responsables por este desaguisado, petición que más parece un intento desesperado por salvar su propia cabeza.
Anécdota: el aeropuerto de Guarulhos, conocido también como de Cumbica, fue construido en una zona cuyo nombre, en tupí-guaraní, significa «banco de niebla».