Si en el mejor café del mundo vimos la importancia histórica y económica que el café tiene para Brasil, hoy vamos a abordar algunos consejos prácticos para poder facilitar la comunicación durante vuestra estancia en Brasil.
Lo más probable es que oigáis hablar numerosas veces de esa institución brasileña que es el cafezinho. El cafezinho es una parte tan integral de la cultura brasileña que ha llegado a convertirse en sinónimo de gratificación. Si quieres dar una propina a alguien por algún servicio realizado, dile que le estás dando un dinero para um cafezinho. El cafecito – como en muchas culturas mediterráneas – se toma a cualquier hora del día y especialmente después de las comidas. A pesar de la importancia que el café tiene en las relaciones sociales de los brasileños, el consumo per cápita (4,7 kg por año) está muy lejos de los países más cafeteros del mundo (encabezados por Finlandia).
Cafezinho es una especie de denominación genérica, y no hace alusión a la forma específica en la que os van a servir el café. De hecho, si pedís un cafezinho, lo normal es que os pregunten cómo lo queréis. En general, si pedís un cafezinho en una panadería, o en la pousada en la que os estáis alojando, os van a servir un café preparado o bien en una cafetera con filtro de papel, o bien con colador. Tiene un aroma intenso y un sabor duro.
El preparado con una máquina industrial, el café de nuestras cafeterías, es el expresso. Se puede tomar puro (sería el equivalente a nuestro café solo) o com leite. Dentro de la modalidad del puro, existe el café curto, que lleva menos agua y por tanto tiene un sabor más concentrado. Y el café longo, también conocido como carioca, que se prepara con más agua y por tanto tiene un sabor más diluido.
El café conocido como pingado en algunas partes de Brasil lleva leche. Pero al contrario de lo que ocurre por lo menos en España, donde cuando pides un café cortado sabes qué te puedes esperar, la cantidad de leche que entra en un pingado varía enormemente de un lugar a otro. En algunos lugares te lo van a servir haciendo honor al nombre, colocando unas gotas de leche. Pero en otro te puedes encontrar con algo que se parece más a un café con leche.
Si quieres un café con leche, pide um café com leite o una média.
Es importante tener en cuenta que hay una gran variedad terminológica de unas a otras regiones de Brasil. Varios de los términos mencionados en esta entrada pueden no ser conocidos en algunas regiones del país, que usan otros vocablos en su lugar.
Los brasileños tienen un paladar muy dulce, y en muchos lugares el café ya es servido con azúcar, especialmente cuando ha estado guardado dentro de un termo. De lo contrario, al serviros el café os preguntarán si queréis açúcar ou adoçante?. Es decir, azúcar o edulcorante.
Como curiosidad, el café con hielo, tan imprescindible durante la canícula española, no existe en Brasil, o por lo menos no en la forma que lo consumimos en España. No saben lo que se pierden.
Apuntar también que entre el pingado y café con leche por lo que me dijeron no hay una diferencia tal como entre cortado y café con leche. Pingado se suele decir más en padarias y es mas informal que decir café con leite. En mi caso pedí un pingado en el rubaiyat y me miraron raro. Y por cierto que el café con hielo cuando estuve en BsAs tampoco lo sabían.
Un saludo!
Hola Kike, yo ya ha presenciado discusiones acaloradas sobre el pingado, realmente cada uno lo interpreta a su manera. En teoría, e interpretándolo literalmente, el pingado sería café con unas gotas de leche (los pingos). Además, es un regionalismo.
En cuanto al café con hielo, efectivamente, tampoco lo conocen en BsAs, por eso puse lo de Españna.
¡Un abrazo!
Como curiosidad, el café con hielo, tan imprescindible durante la canícula española, no existe en Brasil, o por lo menos no en la forma que lo consumimos en España.
Juaa y no sabes la que montas si pides uno. Jua jua
… es que estos españoleeeeess.
Pedirlo pedirlo, veras la manera de llamar la atencion.
En una ocasion en Barra do sul (un pueblo pequeño de pescadores) el dueño del bar lo iva pregonando a todo el mundo. «Mira tu este español que toma cafe con hielo, que engraciado» decia.
Jua jua
Hola Tony.
Ufff, para un brasileño el café con hielo está para una herejía gastronómica así como la pasta con coca-cola en Italia o una comida vegan en Castilla y León (o Costilla y Lechón, como quieras jejeje).
Abrazos
Javi
Hombre, tampoco vamos a exagerar. Una cosa es que no se consuma el café con hielo a la española, otra que se le considere una herejía. Pásate por cualquier Franz Café, Starbucks u otras cafeterías más refinadas y verás varios tipos de café servidos con hielo triturado. Lo único que quise decir es que el café con cubitos de hielo grande, como lo bebemos en España, no se conoce por aquí. Pero sí que se le pone hielo al café, por lo menos en los lugares más «refinados».
Los japoneses también ponen hielo en el café =P
mi reacción fue la misma el dueño del bar que Javier conoció kkkkkkkkkkkkkkk
Nara, ya irás a España en verano y probarás el hielo en el café, y te apasionarás. ¡Un abrazo!