paquetes baratos para el mundial de Brasil

Estádio Governador José Fragelli, Cuiabá

Ya son varios los lectores que llegan al blog preguntando por paquetes baratos para el mundial de Brasil. Esta entrada está dedicada a ellos y a otros que se embarquen en buscas similares en el futuro.

Los paquetes baratos para el mundial de Brasil son como los unicornios, los duendes, las sirenas o las hadas. Sois libres de creer en su existencia pero, sin querer ser un aguafiestas, no os los vais a encontrar en vuestro camino a Brasil porque simplemente no existen.

La carestía de los paquetes para el mundial no es una exclusividad brasileña, como algunos podrían pensar (razones no faltan, Brasil es hoy uno de los destinos turísticos más caros del mundo y hemos tenido ejemplos reciente de hasta dónde puede llegar la codicia y abusos de algunos de sus hoteleros). Nunca ha habido paquetes baratos para grandes acontecimientos deportivos o de otra índole. Ni en Brasil ni en cualquier otra parte del mundo.

La duda es ahora saber hasta dónde quiere tensar la cuerda el sector turístico brasileño con sus precios demenciales para el periodo del mundial. Ya hay países como Suiza que se están dando cuenta de que no van a conseguir vender los ingresos que su federación ha obtenido para sus aficionados. Fíjense que en el caso de Suiza no se trata de un problema de falta de poder adquisitivo; la cordura parece imperar. Cuando los suizos se enteran de lo que cuesta un paquete al mundial, se echan para atrás.

¿Ocurrirá como en las vísperas de los Juegos Olímpicos de Londres, cuando el sector hotelero se encontró con millares de habitaciones vacías y tuvo que sacarlas al mercado a precios reducidos? No lo sabemos. La solución de última hora pudo haber funcionado en Londres porque se trata de una capital europea a la que se puede acceder utilizando diferentes medios de transporte de forma relativamente fácil. Pero en el caso de Brasil, y quitando los habitantes de los países vecinos, uno no se va a poder plantear comprar un billete de avión al país con unas pocas semanas de antelación.

La distribución de las entradas en el primer «sorteo» de las mismas llevado a cabo por la FIFA parece indicar que esta y las autoridades turísticas brasileñas prefieren turistas de países con alto poder adquisitivo. Solo así se explica que Estados Unidos recibiera 66.646 entradas, Australia 15.401 entradas o Canadá 13.507 entradas, mientras Argentina se quedaba con 4.493. Brasil no quiere oír hablar de turistas que puedan llegar al país con el auto cargado de víveres y con pasajeros dispuestos a dormir en su vehículo para evitar la debacle financiera que va a suponer pagar una reserva de hotel durante el periodo de la competición.

A mí no me cabe duda de que el mundial de Brasil va a ser, por encima de todo, una fiesta de los brasileños y sus vecinos sudamericanos. No veo al resto del mundo muy dispuesto a hipotecarse para viajar a Brasil durante junio de 2014. Lo harán los que viajan a los mundiales pase lo que pase, e independientemente de donde se celebren. El resto dará un descanso merecido a Brasil durante 2014.

Scroll al inicio
Ir arriba