una semana en la región metropolitana de Recife

Hoy pasa por el Rincón del viajero del blog nuestro amigo Ernesto Machado, para hablarnos de una región de Brasil que conoce muy bien. Ernesto conoció Pernambuco por primera vez en marzo del 2007, como turista. En enero del 2008 regresó y desde entonces vive en Olinda. Sus cinco lugares favoritos en Brasil son la Chapada Diamantina, la Chapada dos Veadeiros, los Lençóis Maranhenses, Salvador de Bahía y Olinda (por supuesto). Mantiene dos blogs, uno personal y otro sobre Olinda, ambos en inglés. Su email es nyenye03 arroba hotmail punto com. ¡Muchas gracias, Ernesto!

Si como Ernesto quieres enviar cualquier colaboración para esta sección del blog, usa la dirección que aparece en la página de contacto del blog.

++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Una semana en la Región Metropolitana de Recife

por Ernesto Machado

Recife y Olinda son conocidísimas por dos razones: el Carnaval y Porto de Galinhas. Carnaval sólo ocurre durante una semana en febrero y Porto de Galinhas, aunque considerada por algunos la mejor playa brasileña, se encuentra a dos horas de la capital.

Entonces nos preguntamos: ¿qué le ofrece la Región Metropolitana de Recife (RMR) al turista?

Recife y municipios aledaños no son ni organizadas, ni limpios, ni seguros. La RMR entre las capitales brasileñas con mayor índice de criminalidad. Es llamada la “Veneza brasileira” por sus canales, pero la realidad es que la mayoría están contaminados y obstruidos. Las playas tienen enormes placas que avisan sobre la amenaza de tiburones. Y ni mencionar que las playas urbanas son, por lo general, poco atractivas, sea en Recife o en cualquier otra capital en el noreste brasileiro.

Tanta mala fama llevaría a muchos a evitar la RMR a toda costa.

Sin embargo, detrás de la mala fama existen una serie de atractivos que merecen ser resaltados. Con vuelos desde varias ciudades brasileñas, europeas y norteamericanas, Recife está posicionada para recibir turistas el año entero gracias a su clima ameno, aunque Carnaval continúe siendo la estación alta.

Mis recomendaciones son cuatro:

  1. El Litoral Sur. Porto de Galinhas es la más conocida playa del litoral al sur de Recife, pero existen otras playas que merecen una visita. Maracaipe, anfitriona de varios concursos de surf, es la vecina de Porto de Galinhas. Posee una infraestructura menos desarrollada aunque suficiente para recibir turistas. Al extremo sur está el lindo Pontal, aunque vale la pena evitar el paseo para visitar los caballitos de mar.

    Al sur se encuentran varias playas que puedes explorar fácilmente contratando un paseo de buggy. La más conocida, sin duda alguna, es Praia dos Carneiros. Además de los arrecifes y las piscinas naturales, es impresionante ver la salida del río al mar, los bancos de arena y la vecina playa de Guadalupe. Los restaurantes no son nada baratos, y sería más barato hospedarse y alimentarse en la vecina Tamandaré.

    Porto de Galinhas en sí es conocida por sus piscinas naturales, aunque a muchos viajeros no les agrada el superdesarrollo turístico de lo que un día fue una pequeña villa de pescadores. Es posible visitar los arrecifes andando o nadando, sin necesidad de un jangadeiro. Para viajeros jóvenes o independientes existen opciones de alojamiento y comida en la villa, mientras que en las afueras (al norte) de Porto de Galinhas existen más resorts y casas de veraneo.

    Tres días son suficientes para conocer Porto de Galinhas, Praia dos Caneiros y Maracaipe, aunque recomiendo no visitas estos lugares durante un fin de semana.

    El autobús que conecta Recife con Porto de Galinhas pasa por el aeropuerto internacional de Recife. Desde el TIP (estación rodoviaria de Recife), puedes tomar el Metro hasta el centro, desde donde parte el autobús a Porto de Galinhas.

  2. Itamaracá. Esta isla al norte de Recife tiene tres principales atractivos: la Corõa do Avião, el Centro Peixe Boi y el Forte Orange. Corõa do Avião es un pequeño banco de arena, una isleta, famosa por sus aguas tropicales. Para llegar a ella hay que contratar un pequeño barco que parte desde la Praia do Forte Orange. Por lo tanto, vale la pena una visita al antiguo fuerte holandés. No muy lejos del fuerte se encuentra el Centro Peixe Boi, donde se cuida e investiga al curioso manatí (vaca marina).

    Además de paseos con agencias o taxistas, es posible llegar a Itamaracá en autobús, tomando primero un autobús al terminal de Igarassú, y desde ahí un autobús al Forte Orange.

  3. Recife. La ciudad en sí es eso mismo: una ciudad. Tiene sus museos, edificios históricos, obras de teatro y demás, pero un viajero con poco tiempo puede conocer lo primordial en un día. Comenzando en el Mercado São José, el mayor mercado público de la ciudad, donde podrás encontrar de todo. También en el centro de Recife se encuentra la Casa da Cultura, situada en una antigua prisión. Quien no tiene interés en compras, puede visitar el Forte das Cinco Pontas para conocer la historia de la ciudad.

    Ya bastante fuera del centro existe una familia que merece dos visitas. El Instituto Brennand (abierto de 13h a 17h) y la Oficina Brennand (abierto de 8h a 17h) son muy diferentes en contenido pero parecidos en majestuosidad. El primero, localizado en el barrio llamado Várzea, es una colección privada de armaduras, pinturas, esculturas y armas. Su primo, Francisco Brennand, posee una enorme colección de escultura y pintura, todas creadas por si mismo, en una antigua fábrica de cerámica. Ambas se encuentran en las afueras de Recife, cerca de la universidad rural y el zoológico, casi al final de la enorme avenida Caxangá. Tras tomar cualquier autobús que transite hasta la Caxangá, es posible tomar un taxi para terminar el trayecto.

    Para quien se encuentra en Recife un domingo, vale la pena visitar Recife Antigo, donde se lleva a cabo una feirinha de artesanato con ensayos de maracatú y bandas de forró. El área también posee bastantes restaurantes y bares.

  4. Olinda. Las laderas, iglesias, restaurantes, museos y atelies de Olinda están todos aglomerados en el pequeño centro histórico, donde caminar es el método recomendado de transporte. Tras un día de conocer el centro histórico de Olinda, es posible continuar con actividades culturales nocturnas. La Bodega de Veio es un pequeño bar en la Rua do Amparo, famosísimo punto de encuentro los martes y fin de semanas. Los viernes la serenata de Olinda camina las calles cantando canciones del ayer. Los sábados el Alto da Sé retumba con sonidos afro-brasileiros provenientes del bar Preto Velho. El primero sábado del mes el Coco de Umbigada celebra una fiesta de samba de coco en el Largo de Guadalupe.

    Para quien aún tiene energías y transporte particular, vale la pena una visitar la Casa da Rabeca do Brasil, en el barrio periférico de Olinda llamado Cidade Tabajara, donde los sábados ocurre una tradicional fiesta de forró. Los sábados también tenemos la fiesta de ciranda de Lia de Itamaracá, en el poblado de Jaguaribe.

    Para quien planea un viaje a varios destinos brasileiros, una semana en Recife sería suficiente. Para quien proyecta unas vacaciones de mayor duración, sería muy fácil combinar una visita a la RMR con destinos vecinos debido a las amplias opciones de transporte partiendo desde Recife.

    Claro que existen muchísimos otros atractivos en la RMR, el más importante siendo la cultura. En Recife y Olinda viven muchísimos extranjeros quienes se dedican a investigar y conocer la cultura del noreste brasileiro. Para ellos existe un universo para conocer: maracatú, samba de coco, cavalo marinho y mucho más. No duden entrar en contacto conmigo si su intención es una visita cultural y desean informaciones más detalladas.

    ——————————
    ENTRADAS RELACIONADAS:
    enlaces: Recife
    enlaces: Porto de Galinhas
    vacaciones en Porto de Galinhas

1 comentario en “una semana en la región metropolitana de Recife”

Los comentarios están cerrados.

Scroll al inicio
Ir arriba